Un terremoto de 7.8 grados que sacudió a Turquía y Siria la madrugada de este 6 de febrero dejó casi a 1,400 los muertos y miles de heridos, señalan las autoridades.
De acuerdo con el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, en su país se reportan al menos 912 muertos, más de 5,300 heridos e incalculables daños materias.
“Es el segundo más fuerte desde el terremoto de Erzincan de 1939. Según las últimas evaluaciones es de 7.7. Hay graves daños también en las zonas vecinas de Siria”, señaló el presidente Erdogan.
De acuerdo con el Servicio Geológico de Estados Unidos el terremoto de 7.8 grados se registró a la 1:17 hora local, derribando con la sacudida casas y edificios en un área amplísima de cientos de kilómetros que va desde el norte de Siria, desde ciudades como Alepo, hasta el sureste de Turquía, donde ha resultado afectada la mayor ciudad turca de la región, Diyarbakir.